Este lunes se ha dado a conocer que Real Madrid ofrecería 226 millones por Kane para el próximo verano, jugador actual del Tottenham Hotspur, según diario británico “The Times”.
El posible fichaje sobrepasa los 220 millones de euros, misma cantidad de dinero que el PSG pagó el pasado verano de 2017 por el astro brasileño Neymar, pero también muy lejos de lo que pagaron los “Merengues” en su momento por Cristiano Renaldo al Manchester United y por Gareth Bale al propio Tottenham.
El presidente del Tottenham, Daniel Levy, no le gusta la idea de vender a su jugador estrella y actual líder de goleo de la Premier League con un total de 21 tantos, por la razón de tener como objetivo de mantener la política del club de pelear con los grandes, sin realizar grandes gastos en incorporaciones.
La intención de Levy es que su máxima estrella pueda ser la llave para lograr un campeonato de la Premier, así como mantener el ritmo para competir en las fases de eliminatoria de la Champions League.
El problema en la que se encuentran los “Spurs”, es que les urgue afrontar el costo de la construcción de su nuevo estadio, estructura por la cual pagarán 850 millones de euros, por lo tanto, la venta de Kane, podría aliviar esa parte del club, ya que en la actual temporada disputarán sus partidos en el mítico estadio Wembley.
El mal momento del francés Karim Benzema, ha provocado que la directiva del Madrid ponga en órbita el apellido Kane, a pesar de que las negociaciones con el club inglés no sean nada fáciles.
Florentino Pérez tiene malos recuerdos en los fichajes de sus actuales jugadores que pertenecieron a Tottenham, como el caso de Gareth Bale y Luka Modric, por la razón de que en esos fichajes se alargaron y llegaron a pagar más de lo esperado.
Si Harry Kane llega a Real Madrid, se convertiría en el cuarto futbolista inglés en vestir la casaca blanca, Michael Owen en 2006, Jonathan Woodgate en 2006 y David Beckham en 2003.
