Este lunes, el futbolista brasileño Philippe Coutinho comienza a vivir su sueño de jugar con el Barcelona donde llega con una difícil misión de hacer olvidar a su compatriota y amigo Neymar.
El antiguo centrocampista ofensivo del Liverpool, convertido en el tercer fichaje más caro de la historia vivió una frenética y especial jornada en el Camp Nou acompañado de toda su familia.
«Estoy muy contento, muy feliz de llegar aquí. Es mi sueño y espero en el campo responder a todas las expectativas», afirmaba con una tímida sonrisa Coutinho en su presentación oficial, con su madre y con unos ojos lagrimosos.
Es un sueño «por toda la historia que este club tiene, por los grandes jugadores que han pasado por acá y por los que hay acá», explicó después ya sobre el césped del Camp Nou, donde miles de aficionados corearon su nombre.
Acompañado Coutinho de sus familiares en la presentación, dio los primeros toques junto a unos niños de la cantera y posó con su nueva camiseta, todavía sin dorsal asignado.
Sin embargo, los hinchas del Barcelona deberán esperar todavía 20 días para verlo en acción junto a Lionel Messi, Luis Suárez y compañía.
Como se esperaba, la revisión médica efectuada a primera hora detectó una lesión en el muslo derecho que ya le impidió jugar sus últimos partidos con el Liverpool y retrasará su debut como azulgrana hasta finales de enero.