Marcó el futbol de su país por varias razones, pero para alcanzar la gloria pasó momentos de angustia, en especial por una lesión que ocasionó que Roberto Baggio le pidiera a su mamá que le quitara la vida, tras el periodo de recuperación de su primera operación. El delantero confesó sus pensamientos y cómo es que llegó a la religión para lograr superar adversidades en su carrera.
El delantero está en el Salón de la Fama del Futbol en Pachuca.
Referente con equipos como Fiorentina, Juventus, Milan, Inter de Milán y el seleccionado italiano, Baggio sufrió momentos difíciles, en especial cuando tuvo una lesión que le quito toda esperanza.
El equipo del Milán apenas tiene 3 victorias en la temporada. ?A comparación del Inter y la Juve, los ‘Rossoneri ‘van a la baja.
?Pueden firmar su peor temporada en los últimos años.https://t.co/ZHkJGyjQ8a
— Nación Deportes (@naciondeportes_) October 10, 2019
En 1985 fue intervenido de la rodilla con una operación que no fue nada sencilla, y que incluso lo hizo dudar de querer seguir con vida, el delantero confesó haber pedido a su madre que lo matara.
El jugador falló un penal en el Mundial de 1994 que dio el triunfo a Brasil.
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«Las lesiones fueron una pesadilla para mí. El día después de mi primera operación de rodilla le pedí a mi mama que me matara» dijo Baggio.
Después de la operación, el futbolista se acercó a la religión Budista y dijo que eso lo ayudó a entender que todo depende de él mismo, pues antes de esto, buscaba culpar a los demás de lo que le ocurría y siempre victimizarse. Tras integrarse a la religión logró superar estos pensamientos y recuperar la esperanza.
La operación le dejó 200 puntos internos en la rodilla.
En 1993, el referente italiano se coronó campeón de la UEFA Europa League con la Juventus y ese mismo año recibió el Balón de Oro y el FIFA World Player. Marcó 205 goles en toda su carrera en la Seria A, e hizo 27 anotaciones en 56 partidos con la Selección.