La constante lucha contra el racismo en el futbol europeo parece no existir y la UEFA está fracasando en su intento por erradicarlo. A pesar de que en la actualidad existen nuevos lineamientos para contrarrestar este tema, continúan sin respetarse.
El futbol está siendo manchado por este tipo de actitudes.
Desde hace tiempo, han sido varios los futbolistas que han sido afectados verbal y psicológicamente por los aficionados, tanto a nivel de clubes como de selección. 6 meses atrás, la Premier League lanzó una campaña para terminar con este tipo de comportamientos hacia los futbolistas, y al parecer, funcionó.
Los jugadores cerraron sus cuentas de Twitter e Instagram durante 24 horas.
La Asociación de Futbolistas Profesionales de Inglaterra comenzó este movimiento con el respaldo de la liga y la FIFA. El objetivo fue terminar con el racismo tanto en los estadios como en las redes sociales.
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El problema que en Inglaterra habría desaparecido, pero en los partidos de clasificación para la Euro 2020 volvió a aparecer.
En un partido entre Bulgaria y los ‘tres leones’ que parecía terminar sin ningún incidente, el choque quedó manchado por el racismo. En el Estadio Nacional Vasil Levski, en Sofía, Bulgaria, aparecieron cánticos racistas de algunos fanáticos búlgaros para los futbolistas del cuadro visitante.
Hubo desde sonidos imitando a monos (¡uh, uh!) y haciendo señales racistas.
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Tras estos actos el silbante paró en dos ocasiones el encuentro, durante el primer tiempo. Después de los constantes avisos por megafonía, varios aficionados locales abandonaron el estadio.
Lo curioso es que el entrenador de Bulgaria, Krasimir Balakov, declaró que nunca notó actos de racismo y un día después el Presidente de la Federación búlgara, Borislav Mihaylov, renunció.
¿Terminará el racismo en los partidos de Bulgaria?
Recordemos que el estadio búlgaro tenía una sanción de 5,000 asientos clausurados por episodios racistas contra las selecciones de la República Checa y Kosovo, ambos encuentros celebrados en septiembre.
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La UEFA está reprobando en sus intentos por erradicar con el racismo.
Bulgaria no es el único país que ya tiene un historial con este tipo de comportamientos reprobables. En 2013 el representativo nacional de Bulgaria tuvo que jugar varios partidos a puerta cerrada.
Países como Italia, Serbia, Croacia, Rumania, Ucrania, Moldavia, Rusia, España, Francia, Polonia y Grecia también han sido advertidos por la UEFA.
El máximo organismo del futbol europeo ha prohibido que en los partidos de selecciones nacionales entren grupos de animación para evitar actos de racismo.
Tras conocer que la UEFA no puede erradicar con estas situaciones, ahora le pide ayuda a las federaciones de futbol para que comiencen a realizar multas y castigos más serios. En la historia, la UEFA nunca ha expulsado a un equipo de la competencia por las acciones de los fanáticos, pero sería una buena opción.
Todo indica que la UEFA sí ha fracasado en su lucha contra el racismo. Tal vez, todo cambie cuando de verdad tome medidas más fuertes y serias.