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Cuando se trata de reclutar nuevos jugadores para los equipos de NFL, los reflectores siempre están sobre las estrellas del futbol colegial, aquellos que brillaron en cada jugada durante su estancia en la universidad pero existe uno que no estaba en esa lista, el corredor Alvin Kamara.

El actual jugador de los Santos de Nueva Orleans tuvo una llegada complicada a la NFL debido a que muchos reclutadores no lo valoraron como un corredor que pudiera aportarle ese extra a algún equipo.

Todo empezó cuando llegó a la Universidad de Alabama donde tuvo problemas de conducta y una operación en la rodilla, situación que hizo que Nick Saban, entrenador en jefe, le prohibiera entrenar con el equipo.

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Al salir de Alabama, tuvo una última oportunidad en el JUCO con Hutch Community College para lograr que una universidad de Primera División se fijara en él.

En 9 juegos consiguió 1,211 yardas y 18 touchdowns, situación que le otorgó un rating de 5 estrellas por parte de los scouts.

Kamara fue transferido a la Universidad de Tennessee donde se dio a conocer en su primer año con 689 yardas terrestres y 7 TD en toda la temporada.

En su último año terminó en tercer lugar de la conferencia SEC en anotaciones.

Su llegada al draft del 2017 fue espectacular al completar todas las competencias y terminar con el mejor puntaje de todos los RB que participaron ese año.

Fueron 5 equipos los que mostraron interés en él, Carolina, Chicago, Minnesota, Nueva Orleans y Philadelphia y aún así no fue seleccionado en los primeros 60 lugares del draft.

Se proyectaba que un equipo lo eligiera en la ronda 2, como el 4to mejor corredor.

Para la sorpresa de todos, 32 equipos dejaron pasar a Kamara dos veces, hasta que los Santos lo tomaron en la tercera ronda con el pick general 67.

Ahora Kamara tendría otro tema sobre la mesa ya que llegaba a compartir posición con Mark Ingram, corredor titular de los Santos, el RB novato tendría que ganarse su lugar.

La primer temporada fue la ideal para Kamara ya que terminó como el tercer mejor corredor novato de la liga con 728 yardas y 81 recepciones.

Fue nombrado el mejor Jugador Ofensivo Novato de la NFC y rankeado el #20 en los 100 mejores jugadores de la NFL en el 2018. ¡Vaya que se arrepintieron los equipos que no lo tomaron antes!