El Superclásico que se debió disputar en Argentina para definir al campeón de la Copa Libertadores sigue dejando secuelas y ahora Gianni Infantino alzó la voz contra los hinchas violentos que impidieron que se llevara a cabo el partido.
El presidente de la FIFA habló sobre la violencia que se presentó en el Monumental y enfatizó que la decisión de que el partido entre River y Boca se juegue en el Santiago Bernabéu fue de CONMEBOL y que no tuvo ninguna injerencia al respecto.
River Plate y Boca Juniors jugarán finalmente el 9 de diciembre en España por el título de Libertadores.
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Infantino no ha tenido la suerte de presenciar un partido de futbol en sus visitas a Argentina y en gran parte es por culpa de los aficionados violentos que provocaron el pasado 24 y 25 de noviembre que se aplazara el partido entre millonarios y xeneizes en el Monumental de Núñez.
El presidente de la FIFA estuvo presente en el estadio los dos días en que se debió disputar la final.
El suizo explotó contra los hinchas que atacaron al autobús de Boca a su llegada al estadio: «4 idiotas lanzando piedras no deben frenar todo esto«, refiriéndose a que el partido se podía jugar, aunque entendió que el estado de elementos de Boca Juniors impidió que se jugara el encuentro.
Finalmente el mandatario de la FIFA dijo que después de una semana sigue viendo un clima tenso y espera que la agresividad en Argentina se reduzca ya que solamente es un partido de futbol muy importante, no la guerra.