Las finales de conferencia de la NBA cada vez más se ponen más emocionantes, pues por la noche del miércoles los Houston Rockets vencieron a los Warriors con marcador de 98-94 en el quinto juego de la final de la Conferencia Oeste, poniendo el 3-2 a su favor en la serie.
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— Houston Rockets (@HoustonRockets) 25 de mayo de 2018
Gracias a esta victoria, la quinteta de Houston se encuentran a un triunfo de disputar las Finales por primera vez desde 1995 y quitarle el sueño a los vigentes campeones.
Golden State Warriors parase que sufrieron con la ausencia de Andre Iguodala en un duelo que estuvo lleno de tensión e intensidad.
En el último cuarto, Houston perdió a Chris Paul por una lesión y que esta en duda para el sexto juego, el sábado.
El choque entre ambos equipos fue muy parejo, pero las constantes fallas de los Warriors le dieron la derrota y por ende darle a los Rockets esperanza.
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«Para nosotros nada cambia. Vamos partido a partido, posición por posición, intentando competir y ponernos en la mejor situación (para ganar)», comentó Harden.
«Me siento genial por dónde estamos ahora. Esto puede sonar loco pero así lo siento. Sé exactamente lo que estoy viendo ahí fuera», señaló Steve Kerr.
Los Rockets, con la moral por las nubes luego de acabar con la racha de 16 triunfos consecutivos locales en play-offs de los Warriors, lo apostaron todo a su férrea defensa y a las jugadas individuales de Paul y James Harden.
De esta forma, los Rockets quedan a un partido de destronar a los campeones pero su felicidad no es plena: las miradas apuntan ahora a la enfermería y la esperada recuperación de Paul, llamado a ser la clave en las aspiraciones de Houston por el anillo de campeón por primera vez en más de dos décadas.
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