La española nacida en Caracas, Venezuela, Garbiñe Muguruza llega a Australia con algunos problemas en los aductores, mismos que la obligaron a retirarse en Sídney. Pero nadie la descarta entre las candidatas al título en el primer Grand Slam.
La número 3 del mundo, en la primera semana de 2018 sufrió un cuadro general de calambres (en la mano, los gemelos y los cuádriceps) en su encuentro inaugural de Brisbane contra Aleksandra Krunic.
El pasado miércoles, tras ganar en su estreno a Kiki Bertens, la campeona de dos grandes anunció que abandonaba de nuevo, aunque en esta vez como consecuencia de unas molestias en el aductor de la pierna derecha.
Tras la ausencia de Serena Williams, que declaró que no estaba preparada para competir por el título tras el nacimiento de su hija, no hay una favorita clara.
Desde que la estadounidense con 23 títulos en su palmarés inició su baja por su maternidad, nadie ha aprovechado el vacío de poder en el circuito femenino.
De esta forma el cuadro aparece muy abierto, lo que podría aprovechar Garbiñe Muguruza, ganadora de Roland Garros en 2016 y de Wimbledon en 2017.
Tampoco se puede olvidar a la leyenda Maria Sharapova, que regresará al lugar en el que dio positivo hace dos años. La rusa se coloca actualmente en el cuadragésimo séptimo lugar de la WTA y sueña con dar la campanada.