Las probabilidades de llegar a la NFL si naciste con una malformación son casi nulas, pero hay alguien que no creyó en ellas y ahora está a punto de jugar un partido de temporada regular. El camino de Shaquem Griffin a la NFL ha estado repleto de obstáculos, pero su actitud lo ha sacado adelante.
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Griffin nació con una malformación congénita en la mano izquierda, la cual causó que esa extremidad no se pudiera desarrollar de la manera correcta. A los cuatro años, le amputaron esa mano ya que le causaba mucho dolor.
Esto no evitó que Shaquem tuviera una relación especial con el futbol americano. Desde siempre, sus padres lo trataron como igual y le exigían a la par que a su hermano gemelo que también está en la NFL.
Paso por el futbol americano colegial
Shaquem Griffin tuvo destacados números en la preparatoria y esto desembocó en una beca para jugar en la Universidad de Central Florida, donde jugó al lado de su hermano Shaquill. Shaquem jugó desde freshmen hasta senior con Central Florida.
Su carrera en el nivel colegial fue muy buena, fue seleccionado como jugador defensivo del año de la Conferencia AAC en 2016 y durante la campaña pasada fue el capitán del equipo que tuvo un récord de 13-0 y que jugó uno de los tazones más más importantes del futbol americano universitario. En dos años como titular, registró 166 tacleadas y 18 1/2 capturas de mariscal de campo.
Para este entonces, el nombre de Shaquem Griffin estaba por todos lados. En los días previos al NFL Combine, el linebacker no había sido invitado a dicho evento, pero esto no lo desalentó, al contrario, él envió mensajes a la NFL para saber cuando llegaría su invitación. La liga le contestó y Griffin pisó el césped del evento en febrero.
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Los retos del NFL combine
El NFL combine es un evento al cual asisten los mejores jugadores del futbol americano colegial de Estados Unidos, ahí realizan una serie de pruebas físicas para conocer su nivel atlético. Por obviedad, había mucho escepticismo por la condición física de Shaquem Griffin.
Ya en el Lucas Oli Stadium, Shaquem dejó a todos boquiabiertos. El linebacker de la Universidad de Central Florida tuvo una sorprendente actuación:
En la prueba de levantamiento de pesas, el jugador, de 22 años hizo 20 repeticiones con 100 kilos.
En la prueba de las 40 yardas tuvo un tiempo de 4.38 segundos, fue el más rápido entre todos los linebackers que participaron. Esta marca es muy similar al que tuvieron jugadores como Ezekiel Elliott, Adrian Peterson y Odell Beckham Jr.
En las otras pruebas que realizó lució dominante, potente y muy atlético pese a la malformación en su mano izquierda. Esto llamó la atención de todos los scouts, que ahora tenían que pensar si lo seleccionaban en el Draft o lo buscaban como Agente Libre.
El día «D», el Draft de la NFL
Pocos habrían tomado la riesgosa decisión de utilizar una selección de Draft en Shaquem Griffin, un jugador que pese a su gran nivel atlético, tiene una condición médica que podría ser vista como una desventaja.
Griffin estuvo presente en el primer día del Draft que fue el 26 de abril de este año en el AT&T Stadium. El apoyador no escuchó su nombre en los primeros dos días del evento, fue hasta el tercero y último, en la quinta ronda, que los Seattle Seahawks lo tomaron con el pick 141.
Él se convirtió en el primer jugador con una sola mano en ser reclutado en la era moderna. Jugará junto a su hermano gemelo, Shaquill Griffin, quien fue seleccionado en la tercera ronda el año pasado y que comenzó 11 juegos como esquinero titular para los Seahawks.
«Fue literalmente como un sueño, como si realmente estuviera imaginando cosas y simplemente comenzó a suceder», dijo Griffin después de ser tomado en el Draft. «Fue inexplicable. No podía pedir nada más en el mundo que estar con mi hermano».
El camino de Shaquem Griffin a la NFL ha estado repleto de obstáculos, pero en un par de semanas todo el sacrifico habrá valido la pena. La actitud de Shaquem es un sinónimo de nunca darse por vencido. Los Seahawks abren temporada el próximo 9 de agosto contra los Broncos.